Crónica

18-feb-2007

Los Romanes

“ Sople como sople, tranquilo que mauras ”

Continúa el viento fresco (alguien nos ha “echao” una maldición-globera). Algunos se atreven con pantalón corto, pero la mayoría todavía llevan los leotardos. Los asistentes a la cita fueron:

• Juan
• Pepe
• Eduardo
• Rafa

La crónica va a resultar algo liosa. En la salida Pepe y Rafa se preguntaban donde andaría Juan; más tarde apareció en coche aunque avisó de que intentaría incorporarse en Trapiche a la vuelta. También comentó que había divisado a Eduardo maurando como una moto a la caza de la etapa. Antes de Chilches ya había enganchado.

El destino, Los Romanes. Una etapa sencillita si llevas el desarrollo amplio de opciones, a no ser por el viento que sopló. Por la N-340 se promediaban los 30 km/h sin mucho esfuerzo, pero una vez llegado a Torre del Mar en la cuesta del Hospital se puso de frente y fuerte bajando la media. En ese momento nos pasó un globero con plato a buen ritmo. Rafa se pegó a rueda y lo mantuvo hasta El Ingenio pero al ver que no le seguían se dejó caer.

De nuevo agrupados continuaron camino de La Viñuela con un vientazo impresionante. Pocos relevos. Rafa empujaba e iba regulando. En los repechos del cruce de Canillas se subían casi al límite para calentar antes del rampón de 2 kilómetros. Pepe se quedó atrás ya que soplaba cruzado y los relevos le quitaban poco. Eduardo mantuvo desarrollo y remató a lo campeón.

Vuelta al grupo hasta que en la Trampa se prepararon para subir de un tirón ese 8% de desnivel. Comenzó Eduardo con el plato. En cuanto se puso tensa la cadena engranó el 39 y se hundió. Rafa marchaba justo detrás y continuó con 39x23 a un ritmo de 14 km/h durante algo más de un kilómetro. Al despegarse se relajó y esperó al resto.

Faltaba el toque final. Afortunadamente el viento se aplacó gracias a las montañas, ya que de no haber sido así difícilmente se hubiera podido acabar la etapa. También ayudó el reasfaltado de los 2 últimos kilómetros. Tiempo de llegada 1:40 h.

Al regreso Eduardo se paró a hacer algunas fotos aprovechando que el día estaba despejado.

La bajada del rampón fue espeluznante. A 75 km/h con una rueda de 2 centímetros con 7 kilos de presión, lo primero que piensa uno es que no se cruce nada por la carretera. Una vez pasado el susto el resto fue más llevadero: llaneando a 50 km/h con pulso bajo. Así se podía dar cuenta uno del esfuerzo que se hizo a la ida.

En Trapiche pararon a desayunar. A Juan lo engancharon 5 minutos después de haber salido del pitufo. Bajaron la media para no asustar al globero convaleciente.

En Torre del Mar fueron adelantados por un grupo numerosísimo de globeros de élite. El viento en contra otra vez dificultaba superara los 30 km/h sin relevos. Eduardo se acopló bien al grupo y marchó con ellos. Pepe, Juan y Rafa se descolgaron ya que iban cerrando y la goma era horrorosa con tanta gente y el viento. Juan aflojó ya que iba a encontrarse con un vecino que entrena poco. Rafa fue a por Pepe para montar un tren nuevo a ritmo constante. Antes de Almayate ya marchaban los 3 como siempre en fila dando un clase de cómo se rueda en grupo. Poco a poco fueron adelantando globeros que se descolgaron de tan cuantioso grupo, llegando a formar uno de 7 participantes que contactó con parte del principal en la recta de Chilches a 34 km/h contra el viento.

Un entrenamiento muy simpático. A ver si llega el calorcito de una vez. El tiempo total fue de 2:54 h.

 

Cronista: Rafa.