Crónica
28-feb-2007
Ventas de Zafarraya
“ Lo del Boquete de Zafarraya no es normal "
No nos quitamos el viento ni de coña. Hoy salieron a celebrar el día de Andalucía:
Eduardo tenía planeada una ruta mayor por los Alazores, Colmenar, La Reina.... lo que viene siendo un paseito, pero no lo tiene claro todavía. Una vez que corone en Zafarraya decidirá que hacer.
La “arrancá” fue rauda. Pronto se montó un tren a una media de 30 km/h. En El Ingenio pinchó Rafa a causa una vieja rotura en la cubierta trasera, pero el muy globero se olvidó de reparar y hasta de llevar repuestos en la mochila. Menos mal que los compañeros pusieron de todo: mientras Rafa arreglaba el pinchazo, Eduardo sacaba una cámara nueva, Pepe buscaba un trozo de cubierta para tapar la herida y Juan ponía un parche a la cámara pinchada para que sirva de repuesto: todo sincronizado como en la Fórmula 1.
Una vez reparada la “chapu” continuaron con viento en contra hasta arriba. Tiraron por Trapiche evitando la carretera nacional. Los toboganes calentaron los motores hasta El Puente de Don Manuel donde se estableció el libre albedrío (1:25 h). Quedaban 12 kilómetros hasta la meta que valdrían por 24 en situaciones normales a causa del vientazo. Rafa mantuvo con el 23 hasta donde empezó a encontrar incomodidad en la pedalada. Pepe reguló quedando por delante de Juan, mientras que Eduardo escalaba posiciones hasta agarrar a Rafa a media subida.
El solecito calentaba lo justo. El viento no paraba de frenar las pedaladas de los globeros. Mientras más se subía más fuerte soplaba. Los 3 últimos kilómetros fueron terribles. El tiempo de llegada de Rafa y Eduardo fue de 2:22 h, 5 minutos después llegó Pepe y 3 más Juan.
Eduardo se puso piñones al tema y continuó con su ruta prevista. El resto descendieron hasta el restaurante de La Fuente a media subida para probar bocado. A Rafa se le volvieron las órbitas al ver que el camarero había preparado 3 tarugos de carne en un asador de pollos, pidiendo pitufos bien nutridos para todos, pero Juan y Pepe se asustaron al ver la carne asada y rehusaron la invitación manteniendo la dieta habitual. Otro día habrá que volver a probar un buen almuerzo en esa casa fundada en 1.956 que ha sido remodelada y pone la carne como al cronista le gusta (jejeje).
El regreso fue como se esperaba, con más viento. Llegaron bien “mauritos”a una media de 25,0 km/h con varios globeros de la N-340 chupando rueda.
Cronista: Rafa.